VI liga de invierno
1ª jornada - 30 octubre 2004
CALERO SE DESQUITA DEL NACIONAL, 2 ROSCOS
LEPE COMIENZA FUERTE, DOS SEGUNDOS
FERNANDO BARÓN GANA EN B A JOSÉ MIGUEL
Ha comenzado la sexta edición de la liga. Caras nuevas, ausencias destacadas, vamos, lo de costumbre. 13 regatistas se dieron cita en Puerto Sherry y fantástico 30 de octubre, que aún siendo de vientos algo rolones del SW, nos dejaron un fantástico y divertido día de regata.
Primera manga. Corta por la escasez de viento. Roles que dejaban los bordos muy desigualados. Tras varios cambios de liderato durante la ceñida, Calero montaba barlovento primero, seguido de Lepe, Lupa (que tocaba baliza y daba su girito) y Chiri. Tras ellos, grupo nutrido comandado por Curro y Tronko.
Llegada a sotavento con cierta ventaja de Calero y Lepe y Chiri muy pegados. Chiri de desmarca para el bordo de babor. El resto de la flota, a excepción de Tronko, sigue en fila "borreguil" a Calero. Chiri y Tronko se hunden; su valentía les salió cara. En la empopada seguía liderando Calero, con Lepe detrás y Lupa ya tercero. Les seguía Chiri y Curro. Última ceñida con algún role puñetero, que hacía que Lupa y Chiri se cambiaran las posiciones y que Calero marcara a rabiar a Lepe.
Finalmente Calero aguantó y llegó primero. Tras Lepe (2º), Lupa se salió con la suya y ganaba a Chiri (4º). Curro, que se fue a mariscar a la calita, perdió la quinta plaza frente a Climent, entrando 6º. Les siguieron Paco, Nacho Alcina, el desafortunado Tronko, Fernando Barón (1ºB), Tato, Eduardo y nuestro novato José Miguel.
Nuestro novato José Miguel a su llegada a Puerto Sherry |
La segunda manga comenzaba con más viento y parecía que algo más estable (parecía, pero no es oro todo lo que reluce).
Calero y Chiri luchaban por montar primero en barlovento, pero de nuevo Calero conseguía montar primero tras planchar a Chiri, dejándolo atrás a cierta distancia. Tras ellos, Lupa, Lepe, Climent, Paco,...
Pocos cambios en los dos largos, aunque llegarían los sustos en la segunda ceñida. El grupito que se pasó de baliza iba con un viento que más quisieran haber tenido los que viraron justos. Esta sorpresita de Eolo hizo que Chiri y Lupa perdieran opciones de acercarse a Calero (que ya navegada relajado) y que vieran "acojonaos" como Lepe y Climent, desde atrás, los pasaban como si fueran en otro tipo de barco; hasta tres veces tuvieron que virar Lupa y Chiri para montar barlovento. "Dichosos los afortunados porque Eolo les hará llegar primeros".
Tras este caos, una popa tranquila y sin muchos sobresaltos, pero de nuevo la ceñida traía jaleo. Ahora no fue Eolo, sino el dios de la "gasofa", que abandonó a nuestro comité cuando se dirigía a montar la llegada. Calero y Climent decidían (no sabemos muy bien por qué), pararse junto al comité (que estaba fondeado a mitad de ceñida). El resto de la flota decidía montar la baliza de barlovento y completar así el recorrido.
Tras llegar a tierra, el comité decidía no anular la prueba, llamando la atención a la regla fundamental de deportividad, para que todos los regatistas fueran honrados y dijeran su puesto real en barlovento. A Calero se le daba el triunfo aún no habiendo llegado a barlovento, ya que su triunfo era claro. A Climent también se le daba la tercera plaza, mucho menos clara y dudosa, tanto para arriba como para abajo, pero bueno, no era cuestión de echar por tierra toda la prueba. Esta situación nos lleva a modificar las instrucciones de regata, añadiendo un nuevo punto que obligará, en el caso de que el comité no pueda montar la llegada, a montar la baliza de barlovento.
De izquierda a derecha: Curro, el osito Lepe, Tronko y Eduardo tras la llegada a tierra. |